Conoce cuales son los tipos de fracturas abiertas y su tratamiento médico

Las fracturas abiertas son un tipo de rotura ósea cuyo grado de traumatismo es mayor y, a diferencia de las cerradas, estas por ser expuestas representan un alto índice de probabilidades de contagio de infecciones óseas, además de ser clínicamente más complejas. En este artículo, te enseñaremos cuales son los grados o tipos en las que estas se clasifican y el procedimiento médico general que se lleva a cabo.

Fracturas abiertas, clasificación y tratamiento

Clinicamente hablando, las fracturas abiertas involucran una serie de aspectos que agravan su condición, además de ser conminutas (fragmentos de hueso), ya que al ser expuestas, la estructura ósea fracturada entra en contacto con el medio externo a través de una herida, esto representa no solo la abertura superficial de la piel, la cual viene siendo la primera barrera contra agentes patógenos, sino que además se hallan otros traumatismos en donde existe una rotura de vasos sanguíneos, tejidos blandos, nervios y, principalmente, la contusión de músculos. Este tipo de fracturas se clasifican de acuerdo al mecanismo traumático, nivel de contaminación y el compromiso o grado de daño de estructuras blandas y vasculares:

  • Tipo I: se trata de una fractura abierta de tipo I cuando el mecanismo traumático fue de bajo impacto, la herida es menor a un centímetro, presenta escasa conminución o fragmentos óseos y no presenta compromiso vascular.
  • Tipo II: en esta fractura existe una mayor longitud de la herida, pudiendo estar entre los 2 y los 10 centímetros, no hay compromiso vascular pero el mecanismo traumático es de mediano impacto y no presenta rasgos extensos de desgarre y daño en tejidos blandos.
  • Tipo III: está fractura representa una contusión extensa de tejidos blandos, la herida es mayor a los 10 centímetros y hay presencia de conminución y pérdida ósea, en esta categoría se incluyen traumatismos en las que un miembro es amputado o heridas por armas de fuego, por ejemplo.
  • Tipo III A: se incluyen aquellas fracturas que pueden ser a causa de aplastamiento cuyas heridas si están contaminadas, existen fragmentos óseos pero la lesión de las partes blandas no es por completo y no hay contusión a nivel vascular.
  • Tipo III B: en estas fracturas no hay compromiso vascular al igual que la anterior, pero la lesión en partes blandas es más extensa, además la contaminación es masiva, pudiendo ser aquellas fracturas en donde el trauma ocurrió en medios rurales o por arma de fuego, y existe un despegamiento perióstico, es decir, desprendimiento parcial.
  • Tipo III C: en esta clasificación se encuentran todas las fracturas expuestas donde exista compromiso vascular como, por ejemplo, miembros amputados, es decir, presencia de un despegamiento perióstico total.

tratamiento medico fracturas abiertas

El tratamiento tiene como objetivo principal evitar y disminuir el riesgo de infección ósea además de la reparación del tejido blando y estructuras vasculares comprometidas. Por lo general, se administran antibióticos vía intravenosa ya que estos disminuyen la tasa de infección en la estructura ósea, además, el equipo de traumatología procederá al desbridamiento o aseo quirúrgico de la herida lavando con soluciones fisiológicas o suero para eliminar la suciedad empleando gasas estériles, posterior a esto, se colocan apósitos absorbentes que cubren la herida mientras el paciente es llevado al área quirúrgica. El equipo médico debe realizar la reducción de la fractura o el alineamiento de la misma lo más cercano a su posición anatómica natural, verificando pulsos luego de esto.

fractura abierta cuidados

Quirúrgicamente, la fractura ósea se trata con placas de acero que unen los fragmentos óseos, si hay compromiso vascular y contusiones en otras áreas como músculo, se procede a su reparación mediante suturas y otros elementos dependiendo del nivel de daño, luego se realiza una inmovilización con férula o yeso de ser el caso.

 

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