El antebrazo está formado por dos huesos, el cúbito y el radio, este último es el que se haya en la parte externa del mismo. Las fracturas de radio son una de las lesiones más comunes en niños o en aquellas personas que realizan actividades deportivas como el patinaje. En este artículo conocerás cómo se clasifican las fracturas de radio y su tratamiento.
Fracturas de radio, clasificación y tratamiento
Las fracturas de radios pueden ser abiertas y presentar desplazamiento de fragmentos óseos lo que agrava la condición de la rotura. Estas, al igual que otras fracturas, es diagnosticada mediante radiografías que permitan apreciar el nivel y la extensión de la rotura ósea. En la literatura médica existen diversas categorías en las que se dividen las lesiones a nivel óseo. Existe un grupo extenso que abarcan a su vez a las fracturas de radio, las más comunes pueden ser:
- Fractura Galeazzi: es aquella que ocurre en el tercio distal del radio o en la diáfisis del hueso. Está puede ocasionar una fractura abierta debido al astillamiento del radio.
- Fractura de Torus: está rotura es una de las más leves, la cual no presenta mayores complicaciones ya que es una fractura incompleta en donde no se presenta desplazamiento.
- Fractura epifisaria: aquellas que ocurren en el crecimiento del cartílago, ubicado cerca de la muñeca.
Por otro lado, también pueden ser fracturas de radio en tallo verde o distales, las cuales son igualmente incompletas y en estas una porción del hueso se dobla. Con respecto al mecanismo de traumatismo de cualquier fractura de radio, estas pueden darse en caídas accidentales en donde el aterrizaje sea sobre el brazo extendido, pudiendo, además, comprometer al otro hueso del antebrazo, el cúbito, también, pueden deberse a caídas en donde el cuerpo impacte sobre el brazo y este se doble.
Con respecto al tratamiento de las fracturas de radio, va a depender del tipo de rotura y la localización de la misma. Ante la presencia de una fractura de Torus o fractura en rodete, debido a que estas son incompletas y no representan la necesidad del empleo de una reducción, el tratamiento se lleva a cabo con la inmovilización del antebrazo a través de un yeso o férula hasta que se consiga la consolidación completa de la rotura.
Ahora, el tratamiento para el resto de las fracturas de radio, las cuales pueden presentar un desplazamiento óseo, si no existe alguna exposición, el procedimiento de reducción puede necesitar una intervención quirúrgica, ya que por lo general, la fractura Galeazzi, por ejemplo, presenta fragmentos óseos que deben ser fijados entre sí con ayuda de fijadores externos, placas o tornillos .
Cuanto el traumatismo ha lesionado parte de la articulación de la muñeca o codo y el paciente presenta cierta rigidez luego del retiro de los inmovilizadores, debido al tiempo sin flexionamiento o uso de los mismos, esta condición irá desapareciendo con el tiempo de recuperación, el médico puede indicar sesiones de fisioterapia para reanimar dichas articulaciones y ejercitar los músculos que rodean el antebrazo para una mejor recuperación de la fuerza.
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