Se trata de una técnica de reproducir a la bella planta Azalea. Debes podarlas cuando llegue la primavera. Requiere de varios pasos sencillos de seguir. Esta tarea sirve de relax, así que pon manos a la planta.
Observa las características de tu planta madre de Azalea
- Su tallo es leñoso y de muchas ramificaciones y no es compleja de cultivar.
- Es una planta ornamental de forma redondeada.
- Sus hojas son pequeñas y elípticas, de verde intenso y brillante, resguardan sus flores en parejas.
- Pueden ser reproducidas en jardines o interiores.
Herramientas
Quizás te pueda interesar:
- Macetas con buen drenaje
- Tierra y humus
- Tijera de poda de una mano (cortan ramas de hasta 2,5 cm de diámetro) o bien la de con corte deslizante o bypass.
- Un par de guantes.
- Bolsas de plástico.
- Un lápiz.
- Sulfato de hierro para acidificar la tierra.
- Hormona de enraizamiento, entre otros implementos
Técnica de injertos o esquejes
- Seleccionar la planta madre. Verifica que la planta no tenga plagas.
- Rellenar una o varias macetas con tierra preparada húmeda y suelta. Deben tener una profundidad de 15 centímetros (6 pulgadas).
- Regar la tierra para que quede firme.
- Cortar con la podadora gajos largos entre 10 y 15 centímetros, de la planta madre. Se recomienda hacer la poda entre los meses de junio y julio. La rama debe ser flexible, pero firme.
- Cortar todas las hojas de la rama, excepto las de la punta. Elimina los pimpollos, brotes y flores.
- Sumergir y humedecer cada extremo de los gajos cortados en la hormona de enraizamiento, siguiendo las instrucciones del prospecto impreso. Hay que sellarla en plástico y dejarla enfriar por varias horas.
- Realizar agujeros en el centro con la ayuda de un lápiz, de acuerdo al número de macetas previamente preparadas.
- Colocar cada gajo hasta lo profundo en la tierra a unos 5 cm a 7.5 cm de profundidad.
- Con tus manos afirmar cada gajo para que se sostenga en su lugar.
- Cubrir cada maceta con plástico. Si no tienes, ubícalos en un sitio húmedo de la casa para que no se sequen
- Tapar la maceta con plástico a fin de evitar que la tierra se seque.
- Colocar las macetas en un lugar con buena iluminación, pero no directa al sol.
- Esperar 8 semanas para dejar que broten las raíces. Vigilarlas entre 2 y 3 veces a la semana para controlar sus brotes. Humedecerlas sólo si lo requieren.
- Abrir en la novena semana la envoltura de plástico.
- Al brotar las raíces al menos 2.5 centímetros de largo, debes trasladarlas a macetas más grandes.
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